El conocido Sacerdote Jesuita de Antofagasta, Felipe Berríos, participó del «Primer Encuentro de Regiones Mineras de la OCDE» que se celebró los días 5 y 6 de octubre en la ciudad de Antofagasta, Chile.
En dicha oportunidad Berríos participó del panel «Calidad de vida y bienestar: oportunidades y desafíos», centrando su exposición en la calidad de vida urbana y las desigualdades. Respecto a esto nos cuenta su visión sobre este tema y las diferencias existentes entre Chile y el resto del mundo.
Nos puede hablar un poco sobre el tema que habló en el panel de discusión, sobre calidad de vida urbana y las desigualdades entre Chile y el resto del mundo.
No estoy en contra de la minería, sin la minería Antofagasta no habría existido. Sin embargo, en lo que sí estoy en contra es en que haya estándares distintos, que se aplican en los países subdesarrollados y los desarrollados.
No escuchamos lo que la gente necesita y llegamos con estándares que son Europeos o Norteamericanos, que no coinciden con nuestra realidad en vez de escuchar a la gente que vive en el lugar. A veces, cuando estamos en un lugar confortable se nos olvida que hay gente que vive en peligro en la misma ciudad.
Yo creo que las desigualdades se deben en gran parte al clasismo del chileno. Por ejemplo, hay veces en que los estándares están bien, pero el problema está en cómo se aplican. Las empresas pueden tener sus ideales, sus estándares éticos, pero quienes los aplican en nuestro país son los ejecutivos chilenos. Lo ejecutivos chilenos hacen la misma distinción que me hacían a mí en África, que por ser blanco me colocaban la jeringa esterilizada y si era negro te colocaban otra.
¿Qué nos puede decir respecto al desarrollo de este tipo de Iniciativas? (Encuentro de Regiones Mineras del mundo)
Yo creo que estas instancias son justamente para decir las cosas con la verdad. Queremos progresar porque creemos que es necesario mejorar, porque creemos que es fundamental la minería para Antofagasta. No se trata de destruirla se trata de ver cómo podemos mejorar.